El ajo es probablemente uno de los alimentos más útiles. Si no me crees, te aconsejo que eches un vistazo a nuestro artículo aquí.
Por no hablar de que el ajo es esencial para dar sabor a cualquier receta.
¿Y si pudieras cultivarlos fácilmente en tu jardín sin tener que comprarlos nunca? No se preocupe, ¡ya verá que es muy fácil!
Cada bulbo que plantes se multiplicará y dará 3 ó 4 nuevos dientes de ajo. Ver :
Cómo hacer
1.Prepara una maceta llena de tierra de semillero, preferiblemente una maceta con drenaje.
- elegir dientes de ajo muy frescos.
- Separar las vainas con cuidado de no dañar su base. 4. Enterrar cada vaina.
Enterrar cada vaina colocando la parte puntiaguda hacia arriba bajo unos centímetros de tierra de maceta. 5. Separarlas unos 10 cm.
Sepáralas unos 10 cm. 6.
- Mantén la tierra de la maceta húmeda, pero nunca empapada, ya que el ajo no necesita mucha agua.
- deja que el ajo crezca un poco, pero recuerda cortar las flores con regularidad para que todo el sabor permanezca en el bulbo.
- una vez que tu planta tenga 5-6 hojas que se vuelven amarillas y empiezan a morir, el ajo está listo para cosechar.
- deja secar el ajo en un lugar fresco y seco como un garaje durante una semana.
Resultado :
¡Y ya está! Acabas de cultivar ajos en casa 🙂 ¡Ya ni siquiera tienes que comprarlos! Sencillo, ¿verdad? Que sepas que la mejor época para plantar ajos es a principios de primavera u otoño.
El ajo tarda entre 8 y 10 meses en crecer. No tires los pequeños tallos verdes del ajo. Se comen como cebollino, o para aromatizar una sopa o requesón, por ejemplo.
Una vez cosechados, guárdalos en un lugar fresco y seco.
¿Cuáles son los beneficios del ajo?
Como te decíamos en la introducción, el ajo tiene muchos beneficios para la salud. El ajo es rico en vitaminas B6 y C, selenio, manganeso, calcio y potasio. También es bajo en calorías, con sólo 42 calorías por ración. Refuerza el sistema inmunitario. Su consumo regular previene el 63% de los resfriados y el 63% de los catarros comunes. También es excelente para el corazón, ya que limita el riesgo de problemas cardíacos y ayuda a reducir el colesterol. La misma observación para las personas que sufren de hipertensión arterial: Comer regularmente sería beneficioso.